La grandeza de lo verde en las afueras de la ciudad
El secreto mejor guardado de la ciudad
En el lugar donde en algún momento la abadía de San Bavón se levantó en todo su esplendor encontramos uno de los secretos mejor guardados de la ciudad. Un patio (pandhof) medieval entre ruinas descubiertas y una iglesia verde. Cinco metros de columnas de carpe evocan la iglesia tristemente desaparecida, que una vez fue la iglesia románica más grande de los antiguos Países Bajos. ¿Te gustan el misticismo, el romanticismo y las plantas raras? En ese caso, ¡no dudes en pasear por el secreto mejor guardado de la ciudad!
Un patio medieval
Entre las ruinas cubiertas de vegetación descubrimos un patio medieval con una valiosa flora mural. En el lugar por donde los monjes vagaban y murmuraban sus letanías, hoy día crecen más de 210 plantas diferentes entre las piedras antiguas. Algunas son bastante raras. Corydalis, cardo mariano, senecio, erigeron, clematítide, etc., preciosos nombres de plantas, cada una con su propia paleta de colores. ¡Un ejemplo único de biodiversidad en plena urbe!
Een uniek staaltje biodiversiteit
Tussen de begroeide ruïnes schuilt een middeleeuws pandhof met een waardevolle muurflora. Op de plek waar ooit monniken kuierden en prevelden groeien vandaag tussen de eeuwenoude stenen meer dan 210 verschillende planten, waaronder enkele heel zeldzame. Gele helmbloem, mariadistel, bezemkruiskruid, fijnstraal, pijpbloem… tongstrelende namen van planten elk met een eigen kleurenpalet. Een uniek staaltje biodiversiteit in de stad!
Benieuwd wat je er zoal kan spotten?Azul púrpura y gris, aquí las piedras pueden ir deshaciéndose con toda la tranquilidad del mundo, y verdes crecen los helechos en los muros que estarán presentes durante muchos siglos más cuando nosotros ya no estemos.